Viena.- Las autoridades austriacas están dispuestas a devolver a EADS los 15 aviones Eurofighter entregados hace unos años y exigir la devolución de los pagos realizados, si se prueba la existencia de una trama de corrupción europea que actualmente investigan las Fiscalías de Viena, Munich y Roma.
Hace dos semanas el diario alemán ‘Süddeutsche Zeitung’ publicó que las autoridades policia-les europeas habían descubierto una gran trama de corrupción en torno a la venta de 15 Euro-fighter a Austria, operación en la que supuestamente algunos políticos habrían obtenido hasta 70 millones de euros.
El pasado día 15 EADS emitió un comunicado en el que anunciaba que había encargado a la agencia Ethic Intelligence una auditoría externa del sistema de conformidad y manifestaba su “plena colaboración con la Fiscalía del Estado en el caso del Eurofighter para Austria”.
El consorcio aeroespacial y de defensa europeo reconocía en su comunicado que “se reaccionó con lentitud ante las alegaciones de actividad impropia en lo relativo a GPT -una filial de EADS-, pero se ha demostrado la valía en la práctica de su sistema de denuncia interna a prueba de represalias”. Y añadió: La evaluación de PwC sobre GPT no encontró pruebas que sugirieran que GPT o ninguna otra compañía del Grupo EADS pidiera a terceros específicos que efectuaran pagos ilícitos en su representación”.
El Gobierno austriaco encargó inicialmente en 2003 a Eurofighter 18 aviones. Cuatro años más tarde se redujo el pedido a 15 aparatos. Desde un principio surgieron sospechas de corrupción en la operación de compra-venta. En 2006 se creó una comisión de investigación parlamentaria que cerró sin grandes conclusiones debido a la falta de pruebas.
Según algunos medios, en 2011 un ciudadano italiano, Gianfranco Lande, detenido por estafa, para protegerse de la mafia confesó a la policía que había creado una red de empresas para una gran firma aeronáutica alemana, con una filial en Londres, Vector Aerospace. En su declaración figuraba una relación de personas vinculadas a EADS.
Hasta a una docena de personas están siendo investigadas con relación al caso por presuntos delitos de fraude, abuso de autoridad y blanqueo de dinero. Recientemente la policía ha registrado varias instalaciones del consorcio europeo en Alemania, Austria y Suiza en busca de pruebas.