Washington.– Un fallo técnico en el sistema de acoplamiento impidió que el carguero espacial ruso Progress volviera atracar en la Estación Espacial Internacional (ISS), según anunció la Nasa.
La nave ya había entregado combustible y alimentos a los actuales inquilinos de la estación -tres rusos, dos estadounidenses y un japonés-, y estaba previsto que se desintegrara al entrar a la atmósfera, cargada de desperdicios. Pero debido al fallo de un nuevo sistema diseñado para facilitar futuras misiones espaciales, tuvo que se retirada a una distancia segura de la estación, alrededor de la cual orbita ahora.
El carguero se desacopló de la ISS el pasado 23 de julio. Según estaba previsto, un nuevo acoplamiento serviría para llevar a cabo una serie de pruebas con el sistema de acoplamiento Kurs modernizado, que en un futuro deberá acoger a otros cargueros espaciales rusos.
No obstante, durante el intento de activar el sistema Kurs se detectaron varios fallos, lo que llevó a la cancelación automática del acoplamiento.
En estos momentos la nave, que se encuentra a una distancia de seguridad con respecto a la ISS, se está preparando para un nuevo intento de acoplamiento, que se llevará a cabo una vez que se analice el fallo producido y se establezca un procedimiento para subsanarlo.
Ingenieros rusos probarán distintas alternativas para intentar acoplar la nave de carga rusa Progress M-15M a la ISS, comentó ayer un portavoz del Centro de control de vuelos espaciales. «Se hará otro intento de enganchar la nave el próximo domingo”, dijo el portavoz a la agencia rusa RIA Novosti.