Washington.- El transbordador espacial Discovery llegó ayer a Washington, donde residirá en el Museo Smithsoniano, procedente del Centro Espacial Kennedy a bordo de un Boeing 747 de la Nasa, debidamente adaptado al efecto.
Casi 2.000 personas -ex empleados del programa, autoridades, turistas y periodistas- se congregaron junto a la vieja pista de aterrizaje para presenciar el despegue del Discovery, entre aplausos y vítores.
El avión y el transbordador realizaron una pasada sobre las playas de Cabo Cañaveral, repletas de público que despidió al Discovery y finalmente enfilaron rumbo norte hacia la capital estadounidense.
El Discovery, estrella de la flota espacial con 39 misiones, es el primero de los tres transbordadores retirados que será destinado a un museo, en el aeropuerto internacional Dulles, en Virginia. Allí ocupará el lugar del transbordador pionero, el Enterprise, que será trasladado a Nueva York.
El Endeavour se dirigirá a Los ángeles en otoño y el Atlantis permanecerá en el Centro Espacial Kennedy.
La Nasa concluyó el programa de transbordadores a mediados de 2011 tras 30 años de vuelos espaciales. Varias empresas privadas estadounidenses esperan ocupar ese hueco.