Moscú.- Rusia lanzó en la madrugada del pasado domingo el satélite de comunicaciones Intelsat 22, una de cuyas misiones consiste en garantizar la capacidad de combate de las Fuerzas Armadas de Australia, según reveló el portavoz de Rosoboronexport, Viacheslav Davidenko.
Según Davidenko, el Intelsat 22, que llevará a cabo varias misiones civiles, también será el responsable de prestar apoyo a misiones de combate del Ejército australiano y sus aliados.
El portavoz de la agencia exportadora de armas rusa adelantó también que Rusia se encargará de lanzar otros tres satélites con misiones militares, el YaSat-1B (Emiratos árabes), el Anik G1 (Canadá) y el Turksat 4A (Turquía), sin precisar las fechas de esos lanzamientos.
El satélite Intelsat 22 despegó desde la base espacial de Baikonur a bordo del lanzador ruso Proton-M y se situó en la órbita programada tras separarse del bloque acelerador Briz-M.
El Intelsat 22, de 6,4 toneladas de peso, fue desarrollado por la empresa Boeing Space and Intelligence Systems para el operador internacional Intelsat Corp. Se utilizará para proporcionar servicios de comunicación a usuarios de áfrica, Sureste de Asia y Oriente Próximo.
El aparato está equipado con 48 transpondedores de banda C y 24 transpondedores de banda Ku, así como con dispositivos de microondas pertenecientes al Ejército australiano.
El lanzamiento del Intelsat 22 a bordo del cohete ruso fue contratado por la compañía International Launch Services Inc. (ILS), con sede en Reston (estado de Virginia) y controlada por el Centro ruso Mijaíl Jrúnichev, diseñador y fabricante de los Proton-M y Briz-M.