Singapur.- A raíz de la reacción de China ante la tasa por emisiones de CO2 impuesta por la Unión Europea a las compañías aéreas que sobrevuelan este continente, Bruselas ha anunciada que está dispuesta a estudiar dicha medida con los gobiernos disconformes, aunque descarta la eliminación de dicha tasa.
«Estamos dispuestos a negociar dentro del marco regulatorio que tenemos», anunció el vicepresidente y comisario de Transporte de la Comisión Europea, Siim Kallas, durante una conferencia sobre aviación celebrada en Singapur. «No intentamos dominar el mundo», indicó.
El pasado 1 de enero entró en vigor en Europa la norma que pretende reducir las emisiones de gases a las que se responsabiliza del cambio climático. Conforme a esta regulación, las compañías que vuelan hacia y desde Europa deben obtener un certificado sobre sus emisiones de dióxido de carbono.
Las aerolíneas recibirán créditos gratis para que cubran la mayoría de sus vuelos este año pero deberán comprar o negociar créditos para cubrir los restantes. Las aerolíneas y algunos gobiernos se quejan de que el impuesto es demasiado costoso y de que Europa lo puso en marcha de manera unilateral.
Existe una seria preocupación en el sector porque tal malestar puede derivar en una guerra comercial entre Europa y el resto del mundo. «Estoy muy preocupado», dijo Tom Enders, consejero delegado del constructor aeronáutico europeo. «He comprobado la posición de China, Rusia, Estados Unidos, India y lo que empezó como solución para problemas del medio ambiente se ha transformado en factor de un posible conflicto comercial», apuntó.
La semana pasada, China prohibió a sus aerolíneas que paguen ese impuesto u otros cobros sin la autorización del gobierno, en tanto que Rusia, India y Estados Unidos expresaron su rechazo a la medida.