Sao Paulo.– Las tres empresas españolas -Aena con OHL, por un lado, y Ferrovial con otras sociedades brasileñas- se quedaron fuera del proceso de privatización de tres aeropuertos de Brasil que resolvió el gobierno de ese país por un total de 14.305 millones de dólares, casi cuatro veces más de lo requerido inicialmente.
Las concesiones de los tres aeropuertos, dos en Sao Paulo y uno en Brasilia, que polarizan el 30% del tráfico de pasajeros en Brasil y habrán de ser ampliados y modernizados de cara al Campeonato Mundial de Fútbol de 2014, fueron otorgadas a tres consorcios diferentes con-formados por empresas brasileñas y extranjeras, originarias de Sudáfrica, Argentina y Francia.
Las propuestas vencedoras representaron un total de casi cuatro veces más que la oferta mí-nima exigida por la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC), de 3.200 millones de dólares.
El aeropuerto internacional Governador André Franco Montoro en Guarulhos (Sao Paulo), el más transitado del país, fue otorgado por 20 años al consorcio Invepar-CSA integrado por Invepar, OAS y la sudafricana ACSA, tras la oferta más elevada de la subasta por 9.454 millo-nes de dólares.
El aeródromo de Viracopos, en la ciudad paulista de Campinas, fue otorgada por 30 años al consorcio Aeroportos Brasil, conformado por Triunfo ParticipaÇões, UTC ParticipaÇões y la francesa Egis, tras una oferta de 2.227 millones de dólares.
Finalmente, la concesión por 25 años del aeropuerto Presidente Juscelino Kubitschek, de Bra-silia, fue para el consorcio Inframérica Aeroportos, conformado por Engevix y la argentina Corporación América, tras una oferta 2.623 millones de dólares.
En cada uno de estos aeropuertos se deberá construir una nueva terminal para que puedan recibir a un total de más de 13 millones de pasajeros al año.