Barcelona.- Representantes de la compañía aérea Spanair y de los pilotos de la misma rivalizaron ayer en madrugar para presentar el concurso “voluntario” o “necesario” de acreedores unos antes que otros.
A primera hora de la mañana, la representación legal de la compañía, ejercida por el bufete Roca i Junyent, presentó en la Ciudad Judicial para su posterior reparto el concurso “voluntario” de acreedores con un pasivo que supera los 300 millones de euros, según informaron diversas agencias.
Mientras tanto, la sección sindical en Spanair del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) aguardaba a las puertas de los Juzgados de lo Mercantil de Barcelona para presentar el concurso “necesario” de acreedores.
La voluntad manifestada por el equipo legal de Spanair era evitar que alguno de los acreedores solicitara el concurso necesario, lo que dificultaría mucho el margen de maniobra en la gestión de la crisis de la aerolínea.
Por su parte, el Sepla indicaba que con la acción de sus afiliados, los pilotos de Spanair pasan a llevar el peso del concurso en detrimento de la compañía aérea.
Por otro lado, la dirección de Spanair anunció a sus trabajadores que presentará en los próximos días un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción para el conjunto de la plantilla, que afectará a un total de 2.075 trabajadores (932 auxiliares de vuelo, 395 pilotos, 325 adscritos a servicios generales, 192 de mantenimiento de aeronaves, 196 de oficinas de ventas y 35 de almacenes).
El director general y responsables de Recursos Humanos de la aerolínea dieron a conocer a los trabajadores sus planes sobre la gestión del cierre de la aerolínea durante una reunión multitudinaria celebrda en las oficinas de la sede de la empresa en Barcelona.
El cierre de Spanair afectó ayer a casi 15.500 pasajeros, que tenían billetes para viajar en los 143 vuelos programados inicialmente por la compañía. Más de la mitad de los afectados corresponden a viajeros con origen o destino en el aeropuerto de Barcelona-El Prat, donde la compañía concentraba la mayoría de su actividad. Estos viajeros se suman a los 22.000 que se vieron afectados el pasado fin de semana.
De los 143 vuelos programados por Spanair para ayer, 85 correspondían al aeropuerto barcelonés, 56 al de Madrid-Barajas y dos a otros aeródromos.