Tokio.- El Ministerio japonés de Defensa está dispuesto a negociar con el consorcio internacional Eurofighter la compra de 42 cazas multifuncionales Typhoon en este año, lo que rompería la exclusiva norteamericana en el suministro de aviones de combate del país, según reconoció el ministro Yasuo Ichikawa.
Se estima que el importe total del contrato podría rondar los 6.000 millones de dólares. Japón nunca antes había comprado aviones de combate a fabricantes europeos, ya que sus exclusivos proveedores fueron compañías estadounidenses. Actualmente la Fuerza Aérea de Japón sólo mantiene operativos aparatos de fabricación norteamericana o mixta, fabricados conjuntamente con Estados Unidos, salvo cierta cantidad de aviones YS-11 de desarrollo nacional, en sus versiones de patrulla, transporte y reconocimiento.
Sin embargo, un rápido envejecimiento de la Fuerza Aérea japonesa hizo que el gobierno japonés decidiera reemplazar sus viejos F-4EJ y F-15 por cazas más avanzados, lo que dará pie a las negociaciones con Eurofighter, que se iniciarán en el marco de la licitación de cazas anunciada en abril por el gobierno japonés.
En el concurso participan las compañías estadounidenses Boeing y Lockheed Martin, así como la británica BAE Systems (uno de los accionistas de Eurofighter junto con la franco-alemana EADS y la italianaFinmeccanica), que han propuesto a la Fuerza Aérea japonesa cazabombarderos multifuncionales F/A-18 Super Hornet, F-35 Lightning II y Typhoon, respectivamente.
«Si EE UU no nos quiere vender F-22 mientras el F-35 no esté listo todavía, en el mercado hay varias ofertas de cazas que nos convienen”, comentó Ichikawa. Al parecer, esta decisión se debe a que la Administración norteamericana aún se niega a proporcionar a Japón información sobre el caza F-22A ‘Raptor’ de quinta generación, el más caro del mundo, cuya venta está prohibida por el Gobierno estadounidense.
De momento Japón quiere reemplazar 42 cazas, la mayoría de los cuales son veteranos F-4EJ, aunque debido a la próxima jubilación de los viejos F-15J, la demanda de aviones podría aumentar hasta 150 unidades.
Por otra parte, Japón está desarrollando un prototipo de avión de quinta generación con tecnología invisible al radar. Esta información fue desvelada en marzo de este año por el General Hideyuki Yoshioka, director de desarrollo de sistemas aéreos del Ministerio de Defensa.
«Si los países que rodean Japón tienen capacidad ‘stealth’ [invisibles para radares], Japón necesitará desarrollar esa tecnología para garantizar su autodefensa», dijo entonces el general en una clara alusión a China y Rusia, que están desarrollando sus cazas multifuncionales de quinta generación capaces de competir con el F-22.