Madrid.- La Audiencia Nacional juzgará a los anteriores dueños de Aerolíneas Argentinas, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual por un delito de defraudación a la Hacienda Pública por un total de 99 millones de euros, correspondientes al impuesto de sociedades en los años 2001 y 2002, según decidió el juez Eloy Velasco.
El ex residente de la CEOE y sus socios en Air Comet tendrán que hacer frente a un delito fiscal por la causa abierta en la Audiencia Nacional por la compra de Aerolíneas Argentinas en el 2001.
A juicio del magistrado Velasco, los acusados cometieron un fraude en la adquisición a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) de la compañía aérea Aerolíneas Argentinas. Sin embargo, descarta por falta de pruebas las imputaciones de malversación de caudales públicos, falsificación de cuentas y estafa procesal.
La Audiencia Nacional acusa a los antiguos propietarios de Air Comet de defraudar 99 millones de euros a la Hacienda Pública, correspondientes al impuesto de sociedades de la aerolínea correspondiente al ejercicio 2001-2002, dentro de la investigación abierta por la compra de Aerolíneas Argentinas. Este delito conlleva penas de hasta cinco años de cárcel cuando el importe defraudado supera los 120.000 euros. Sin embargo, para que se les condene a prisión debería darse un delito continuado, algo que no ocurre en este caso.
El juez Velasco también rechaza la existencia de una maquinación entre la SEPI y Air Comet para defraudar al Estado. Esas actuaciones, estaban encaminadas, dice, «a desprender a éste de empresas con graves problemas de solvencia». La SEPI, según Velasco, solo pretendió «deshacerse de su participación en empresas que constituían un auténtico problema en su gestión con altas probabilidades de aumentar todavía más su endeudamiento», lo que «excluye la intencionalidad criminal» de sus directivos.