Cabo Cañaveral.- Con su regreso esta mañana a la Tierra procedente de la Estación Espacial Internacional (ISS) el trasbordador Endeavour de la Nasa rinde su última misión antes de su jubilación definitiva en el Centro de investigaciones de California, en Los ángeles.
A bordo del transbordador, el penúltimo que EEUU envió a la ISS en el marco del programa Space Shuttle, regresan los seis miembros de su tripulación: el comandante de la nave Mark Kelly, el piloto Gregory Johnson y los técnicos Andrew Feustel, Michael Fincke, Gregory Chamitoff y Roberto Vittori.
El Endeavour desatracó de la ISS en la madrugada del pasado lunes, tras 12 días de operaciones conjuntas. Aterrizó esta mañana en el Centro Espacial Kennedy, Florida, a las 06:32 GMT.
El principal objetivo de la misión STS-134 del Endeavour fue la instalación del Espectrómetro Magnético Alfa (AMS-02) en el segmento S3 de la viga principal de la ISS. Este sofisticado detector de rayos cósmicos quedó instalado en el complejo orbital el día 19 de mayo, tras una cuidada coreografía de los brazos robóticos del transbordador y de la Estación.
El astronauta de la ESA Roberto Vittori controló el brazo robótico del Endeavour junto a Drew Feustel. Los astronautas Gregory Johnson y Gregory Chamitoff maniobraron el de la Estación desde la Cupola de la ISS.
Tras tres horas de ‘ballet’ espacial, el AMS-02 quedó fijado a la estructura de la ISS. Minutos más tarde, se completó la conexión de las líneas de datos y de suministro eléctrico.
El instrumento empezó a registrar datos ese mismo día, y detectó sus primeros rayos cósmicos al día siguiente de su instalación.
Tras instalar el AMS-02, los astronautas del Endeavour realizaron dos paseos espaciales para recoger varios experimentos del exterior de la Estación y colocar otros nuevos. También instalaron una antena en el laboratorio Destiny que permitirá la comunicación inalámbrica con los instrumentos ubicados en el exterior del complejo orbital.
El lunes de la semana pasada, las tripulaciones del Endeavour y de la ISS se despidieron de tres miembros de la Expedición 27, entre los que se encontraba el astronauta de la ESA Paolo Nespoli, que regresó a la Tierra tras permanecer 159 días en el espacio.
La tripulación del Endeavour realizó otros dos paseos espaciales para instalar un punto de anclaje para el brazo robótico en el módulo Zarya y para mejorar el suministro de potencia eléctrica a la sección rusa de la Estación. Por último, repararon la protección térmica de uno de los depósitos auxiliares de la esclusa Quest.