Castellón.- El presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, inauguró el pasado viernes el aeropuerto de Castellón, infraestructura que ha supuesto una inversión por parte del gobierno regional de más de 150 millones de euros y que estará inoperativo todavía unos meses hasta que obtenga las bendiciones del Ministerio de Fomento.
A pesar de estar en un aeródromo vacío de aviones -por la precipitación inauguradora, debido a que la legislación electoral prohíbe a partir de esta semana estas inauguraciones-, Camps reconoció el trabajo invertido por los sectores productivos en la provincia de Castellón al tiempo que afirmó que infraestructuras como el aeropuerto inaugurado generan «riqueza, empleo, prosperidad, orgullo, identidad, fuerza y ganas de compartir proyectos colectivos» al servicio de toda la Comunidad.
«Hoy todo ciudadano de nuestra comunidad se siente más fuerte, más igual, más libre y más capaz por infraestructuras como las que hoy estamos inaugurando», dijo Camps, mientras remarcaba que los ciudadanos de la Comunitat han sabido integrar y quieren seguir integrando «porque parte de nuestra fuerza es nuestra demografía, que siga viniendo gente a trabajar y a invertir».
En la misma línea, Camps ha ensalzado el esfuerzo de los valencianos, castellonenses y alicantinos, que a pesar de las circunstancias económicas, no se han estancado y quieren seguir trabajando y diseñando su futuro.
Así, el presidente regional apeló a las propias infraestructuras de comunicación, los propios cultivos e industrias, para destacar que el valenciano es un pueblo independiente y con capacidad de decidir sobre sí mismo, al tiempo que ha afirmado que la Comunitat representa la modernidad y la vanguardia en España.
Por último, Camps recordó las obras y equipamientos que la Generalitat ha puesto en marcha en los últimos ocho años en la provincia de Castellón y en toda la Comunitat, y en concreto señaló que, con obras como este aeropuerto, «Castellón está en lo más alto de la historia de España en este momento».
“Además, el aeropuerto ejercerá un efecto multiplicador en las visitas que recibe Castellón y en la afluencia de turistas. Así, permitirá alcanzar un equilibrio entre el turismo estacional propio de la temporada de verano y la potenciación del turismo rural, con lo que se logrará la desestacionalización de la demanda a corto plazo”, concluyó.