Bilbao.- La empresa Industria de Turbo Propulsores, S.A. (ITP) obtuvo unas ventas consolidadas de 483 millones de euros en 2010, lo que supuso un incremento del 0,8% con respecto al ejercicio anterior. Los resultados alcanzaron los 42,5 millones de euros, con un crecimiento del 2,0% con respecto al año precedente.
Según Ignacio Mataix, director general de ITP, “el ejercicio se ha desarrollado según el presupuesto, en un entorno de dificultad del sector aeronáutico internacional y de retraso de los grandes programas, a lo que se ha añadido el recorte presupuestario en los programas institucionales”.
En concreto, Mataix señaló que “grandes proyectos, como el A380, que ya es una realidad, y el A400M y B787, han tenido retrasos considerables, cercanos a los 3 años, y esperamos ya su despegue comercial e industrial que tendrá un impacto positivo y relevante. Debe tenerse en cuenta -añadió- que el A400M cuenta no sólo con el compromiso de las naciones socias en el programa, de 180 aparatos, sino que las previsibles campañas exportadoras ofrecen grandes expectativas. En cuanto al Boeing 787, acumula ya del orden de 700 aeronaves confirmadas y Boeing estima unas ventas de unos 2.000 aparatos”.
El director general de ITP significó que el ahorro de costes y la necesidad de una mayor productividad “son claves, ya que la competencia de países de bajo coste es una realidad. Desde el año 2009, países como China y México han desarrollado de forma relevante su industria aeronáutica. Son los principales receptores de las inversiones mundiales del sector y las principales compañías han abierto centros en estos países. Pero, además, en la actualidad, otros países maduros, como el Reino Unido y Estados Unidos, tienen menores costes de producción que los que tenemos en España y también son competencia”.
“En este contexto –añadió Mataix-, destaca la estabilidad de ITP cuyas ventas y resultados han mejorado ligeramente con respecto al año precedente, pese a las dificultades que se han reflejado en la actividad de algunas filiales, como ha sido el caso de PCB, en la que hemos sufrido pérdidas en 2010”.
En el entorno de su participación en las filiales, durante el ejercicio también ha destacado la operación por la que ITP adquirió el 25% de participación que Mexicana de Aviación poseía en Industria de Turborreactores (ITR), pasando a controlar el 99,98% de su filial mexicana e impulsando así su estrategia de crecimiento en México. Esta operación se ha completado con la venta por parte de ITR de su participación del 49% en SAMES (Safran America Engine Services, con base en México). SAMES venía desarrollando actividades de mantenimiento de motores CFM56-5 como parte de la red de mantenimiento de Snecma. La operación permite una aceleración en el desarrollo de la iniciativa estratégica de las actividades de ITP en México y su desarrollo en las áreas industrial, tanto en componentes como en el área de tuberías, impulsado por un contrato por diez años para el Airbus A320, y de servicios de ingeniería.
En otro orden, el ejercicio de 2010 ha servido para consolidar la actividad de mantenimiento y reparación de motores de helicópteros, con la plena operatividad de la planta de Albacete, inaugurada oficialmente en 2009, y las inversiones en instalaciones y maquinaria llevadas a cabo en los centros de Aeromaritime America, localizado en Mesa (EEUU) e ITP Repair UK, en West Sussex (Inglaterra).
En 2010 ITP diseñó su Plan Estratégico 2011-2015, que establece unos objetivos de crecimiento y participación en diseño, fabricación y soporte de motores que llevarán a ITP a duplicar las ventas hasta los 1.000 millones de euros en 2015, invirtiendo más de 500 millones de euros durante los próximos cinco años. De éstos, más de 350 millones estarán dedicados a I+D+i en tecnología y productos, mientras que los restantes estarán orientados al crecimiento de las capacidades industriales de la compañía.