Francfort.- El grupo aeronáutico alemán Lufthansa obtuvo el pasado año un beneficio operativo de 876 millones de euros, incrementando así más de cinco veces sus beneficios del año precedente, que ascendieron a 130 millones.
El resultado del Grupo aumentó hasta los 1.100 millones de euros, un superávit de 1.200 millones de euros. En ese apartado se encuentra el efecto puntual fiscal positivo resultante de una reestructuración financiera del área de negocio Catering de cerca de 400 millones de euros.
El Grupo consiguió así compensar, mejor de lo esperado a mediados de año, los efectos puntuales negativos sobre el resultado económico, entre ellos los causados por el riguroso invierno en los meses de enero y diciembre, la huelga de pilotos y el reiterado cierre del espacio aéreo como consecuencia de la erupción volcánica en Islandia.
A este respecto, resultaron determinantes un aumento de la demanda y las ventas en el negocio internacional de transporte de pasajeros y en tráfico de mercancías, así como la exitosa aplicación de las medidas de reducción de costes en todas las áreas del Grupo y la puesta en práctica del potencial de sinergias en la asociación de aerolíneas. Todas las áreas de negocio han contribuido con sus beneficios de explotación al buen resultado del Grupo.
Christoph Franz, presidente del Consejo de Administración de Lufthansa AG, calificó el año 2010 como pleno de acontecimientos, exigente, pero finalmente exitoso, y afirmó con motivo de la presentación de los resultados: «Podemos estar muy satisfechos con el resultado presente. Demuestra que hemos aprendido de crisis anteriores. Hemos mantenido la flexibilidad financiera y operativa y la disciplina de costes habitual y nos hemos afirmado de forma convincente en el último año, entre otros aspectos también gracias al fuerte rendimiento de equipo de los empleados y cargos directivos, tanto a bordo como en tierra. Pero Lufthansa sobre todo ha incrementado, también tras la crisis, la distancia respecto a sus competidores. Eso nos enorgullece y estimula para lograr el mejor rendimiento posible en 2011”.
El área de negocio más grande de la empresa, el Passenger Airline Group, se benefició en el ejercicio concluido, en particular en el tráfico de rutas de larga distancia, de una recuperación de la demanda y de la aplicación del potencial de sinergias en la asociación de aerolíneas. A los beneficios de explotación de 436 millones de euros contribuyó especialmente Lufthansa Passage con un beneficio operativo de 382 millones de euros. El año anterior, esta sociedad había registrado unas pérdidas operativas de 107 millones de euros. Las medidas de reducción de costes implementadas en el contexto del programa de garantía de resultados Climb 2011, por ejemplo mediante la retirada gradual de los aviones con 50 plazas, contribuyeron a la mejora del resultado. Lufthansa Passage tiene la intención de continuar con el programa Climb 2011 hasta final de año, según lo previsto.
La puesta en servicio de cuatro A380 con una nueva First Class, la introducción del nuevo concepto de cabina Europea en trayectos continentales y la reincorporación de Internet a bordo con “Flynet” han sido sólo algunas de las inversiones acometidas por Lufthansa en las áreas de a bordo y tierra del pasado año. SWISS alcanzó beneficios de explotación de 298 millones de euros, tres veces superiores a los del pasado año. Por su parte, Austrian Airlines registró beneficios operativos negativos de 66 millones de euros, mientras que British Midland añade al resultado global de Passenger Airline Group unas pérdidas operativas de 145 millones de euros. Ambas aerolíneas continuarán implementando de forma consistente las medidas de reestructuración ya introducidas. Gemanwings mantuvo su ritmo de crecimiento, pero condicionada por los efectos puntuales del último año registró un resultado de explotación negativo de 39 millones de euros.