Moscú.- Una tormenta de granizo dejó incomunicado ayer el principal aeropuerto internacional moscovita, el de Domodédovo. El tráfico aéreo tuvo que ser suspendido tras la rotura de varios cables del tendido eléctrico que dejó a oscuras los principales edificios de las terminales.
En el aeropuerto de Domodédovo no pudieron aterrizar ni despegar los aviones, dijo un portavoz del aeródromo. Cientos de pasajeros tuvieron que abandonar el edificio y varios aviones fueron desviados a los otros dos aeropuertos moscovitas.
El portavoz no concretó cuántos aviones y pasajeros se vieron afectados por el cierre. Debido a la lluvia la pista de despegue quedó cubierta por una peligrosa capa de hielo. Antes el suministro eléctrico sufrió cortes. Un cable que alimenta una de las estaciones eléctricas más importantes del aeropuerto se rompió a causa del granizo. En toda la región de Moscú unas 200.000 personas se quedaron sin luz, comunicó la compañía eléctrica.
Numerosas carreteras y calles en Moscú se convirtieron en pocos minutos en auténticas pistas de patinaje. En toda la región se produjeron problemas en el tráfico ferroviario a causa del congelamiento de las catenarias.