Madrid.- Diversas organizaciones internacionales han mostrado su apoyo en estos días de crisis del tráfico aéreo en España, bien a las medidas adoptadas al Gobierno o, por el contrario, hacia los controladores españoles.
Mientras Aena publica el apoyo del Consejo Internacional de Aeropuertos-Europa (ACI) a las medidas adoptadas por el Gobierno español “para poner fin al cierre de espacio aéreo como consecuencia de la huelga salvaje de los controladores”, el sindicato Usca difunde el respaldo que le brinda la Federación Internacional de Asociaciones de Controladores del Tráfico Aéreo (IFATCA).
Olivier Jankovec, director general de ACI Europa, ha destacado que los controladores han causado daños directos a compañías, pasajeros y aeropuertos y que el Gobierno español ha dejado claro que nos tolerará las acciones que hemos visto la última semana. Asimismo, ha subrayado que los aeropuertos necesitan un servicio de control aéreo que sea fiable, seguro y rentable y que los progresos realizados en la Unión Europea la semana pasada para aplicar el Cielo único europeo son alentadores.
En un comunicado, ACI afirma que esta “huelga salvaje” tuvo impacto en todos los aeropuertos de Europa debido a la cancelación de vuelos con origen/destino España así como retrasos en todos los sobrevuelos de la Península Ibérica.
Por su parte, IFATCA “apoya totalmente al miembro de nuestra asociación en estos momentos difíciles. Urgimos al Gobierno de España a revertir sus decisiones. Al recurrir a medidas totalitarias y dictatoriales, España y el proveedor de servicios aéreos ya no pueden ser considerados como socios dignos en ningún proyecto internacional y sostenemos que España ha perdido su derecho a la certificación de Cielo único Europeo (SES). Además, consideramos que España ha incumplido los acuerdos y proyectos internacionales, incluyendo los compromisos adquiridos con OACI. IFATCA urge a los organismos internacionales OACI, la Comisión Europea, EUROCONTROL y CANSO a asegurar que la situación en España no se agrave más y que se vuelva a alinear con los estándares internacionales. De no hacerlo así, podría desencadenar una ola de acciones solidarias de los controladores de toda Europa en apoyo a sus colegas españoles”.