Washington.- Vuelve la polémica suscitada por la implantación de escáneres en los aeropuertos norteamericanos a raíz de la filtración de miles de imágenes almacenadas por la agencia U.S. Marshals, procedentes de un escáner de este tipo instalado en un juzgado de Florida.
Una campaña de protesta contra los escáneres corporales llama a no volar de cara a las fechas navideñas.
La web Gizmodo ha puesto encima de la mesa la prueba de esta situación al revelar 100 imágenes escaneadas de los cuerpos de empleados públicos y ciudadanos, después de llevar a cabo una investigación sobre el tema. Las fotografías provienen de este juzgado en Orlando, y han sido almacenadas sin consentimiento, incluso posiblemente de forma fraudulenta.
Según Gizmodo los rasgos identificativos de estas 100 imágenes han sido eliminados para no causar molestias a los afectados. La Transportation Security Administration (TSA) de EE UU afirma, junto con las agencias relacionadas con los escáners, que las fotografías son “eliminadas automáticamente del sistema”, después de que pase por las autoridades de seguridad pertinentes.
En este caso, como demuestra la filtración de estas 100 imágenes escaneadas, no ha sido así. Esto demuestra que sea cual sea la política que se sigue siempre puede haber un incumplimiento por parte de algunos empleados. Incluso se puede dar la situación de que las máquinas de escáner cometan un error y se guarden datos indebidamente.