Santiago de Compostela.- El ministro de Fomento, José Blanco, supervisó el pasado martes las obras del nuevo edificio terminal del aeropuerto de Santiago, que entrará en servicio en 2011.
Estas obras van a suponer una profunda transformación del aeropuerto para convertirlo en una instalación moderna y funcional con capacidad para atender hasta cuatro millones de pasajeros, con los más altos niveles de seguridad y calidad, mejorando y agilizando su tránsito por las instalaciones.
En total, el Ministerio de Fomento, a través de Aena, va a invertir más de 270 millones de euros en todas las actuaciones de ampliación y modernización del aeropuerto de Santiago que está llevando a cabo. El hito más destacado del proyecto es la nueva zona terminal, situada al sur de la actual y que además de la construcción del nuevo edificio incluye un nuevo aparcamiento y la urbanización de los accesos.
El nuevo edificio terminal, de más de 75.000 metros cuadrados, estará formado por dos cuerpos bien diferenciados: el procesador y el dique. El edificio procesador, donde se realizarán todos los procesos de facturación y recogida de equipajes, dispondrá en una primera fase de 23 mostradores de facturación, de los que uno de ellos estará destinado para equipajes especiales, y cuatro hipódromos de recogida de equipajes.
Este edificio acogerá, además, todas las dependencias e instalaciones que precisen las diferentes empresas que desarrollen su actividad en el aeropuerto. El dique, quizá la construcción más reconocible de la nueva zona terminal por su característica forma de “y”, contará con 13 puertas de embarque, cinco de ellas con pasarelas. También acogerá las zonas comerciales y de restauración, para una mayor seguridad y mejor servicio a los pasajeros.