Madrid.- El ministro de Fomento, José Blanco, anunció ayer durante su intervención en el Congreso de los Diputados que en este semestre se implantarán «con carácter provisional y experimental» escáneres corporales en «algún aeropuerto español» para ver «cómo funcionan y responden los pasajeros».
Blanco recalcó que le preocupa más la seguridad que la «incomodidad» de los pasajeros, pero su intención es comprobar que ambas son compatibles, por lo que su voluntad es probar este sistema con un programa que, «por supuesto», tendrá un carácter «opcional» para los pasajeros.
Durante su comparecencia ante la Comisión Mixta de la Unión Europea en el Congreso, Blanco no reveló cuál será el aeropuerto donde se realizará la prueba, si bien ha insinuado que podría ser catalán, ya que apuntó que «dará satisfacción» a los diputados del grupo parlamentario de CiU, «que tanto preguntan e interpelan sobre esta cuestión».
El ministro aseguró que esta iniciativa se llevará a cabo después de que la Comisión Europea haya realizado un informe sobre estos sistemas de seguridad, en el que concluye que no son lesivos ni para la salud, ni para los derechos fundamentales de los ciudadanos, por lo que «se está más cerca que hace seis meses para su implantación» a través de la trasposición de una directiva de la Unión Europea.