Madrid.- La compañía aérea irlandesa de bajo coste Ryanair registró en su último ejercicio fiscal, que concluyó el pasado 31 de marzo, unos beneficios de 305,3 millones de euros, frente a las pérdidas de 169,2 millones de euros que contabilizó en el ejercicio anterior, según anunció ayer en Madrid el director de Operaciones de Tierra de la aerolínea, David O’Brien.
Durante el pasado año fiscal Ryanair incrementó su facturación en un 2%, hasta los 2.988 millones de euros, tras elevar su tráfico de pasajeros en un 14%, alcanzado así los 66,5 millones de viajeros transportados, frente a los 58,6 millones que registró el año anterior.
Los ingresos auxiliares de la compañía crecieron un 11%, hasta los 664 millones de euros, mientras que el coste del combustible descendió un 29%, situándose en 894 millones de euros.
O’Brien destacó los resultados obtenidos «a pesar de la crisis» y aseguró que la aerolínea mantendrá esta línea de «fuerte crecimiento» hasta el año 2013. Criticó los cierres del espacio aéreo europeo debido a la nube de ceniza volcánica por considerarlos «innecesarios» y «desproporcionados», lo que produjo a la compañía un impacto aproximado de 50 millones de euros, tras perder 1,5 millones de pasajeros hasta el 18 de mayo.