Madrid.- La guerra entre Aena y sus trabajadores encargados del control aéreo no ha concluido, sino que más bien se ha avivado, con la reciente sentencia de la Audiencia Nacional contraria a los controladores en su demanda de inconstitucionalidad del Real Decreto Ley del 5 de febrero y la posterior Ley 9/2010, que regula los servicios de tránsito aéreo.
Mientras el sindicato mayoritario de controladores, USCA,estudia la posibilidad de recurrir dicha sentencia e, incluso, acudir a instancias internacionales, la empresal señala que “la realización de menos horas de jornada laboral en 2010 respecto a 2009 indica que, gracias a la nueva Ley, Aena ha podido planificar sus recursos humanos de manera más eficiente, ajustándolos a la demanda de tráfico aéreo”.
“ Lo que ha venido a corregir la Ley -añade Aena- es la insostenible situación que venía produciéndose, según la cual los controladores cobraban una tercera parte de su jornada como horas extras, llegando a la cifra de 323.000 euros de media por controlador en 2009. Con las modificaciones introducidas, el salario medio de los controladores se situará en 200.000 euros al año, 8 veces más que el salario medio de los trabajadores españoles”.
Aena ha denunciado, además, en sendas notas oficiales emitidas a finales de la pasada semana dos episodios de la reacción por parte del sindicato USCA contra la nueva regulación de su trabajo: “la irresponsabilidad del sindicato al poner en duda la seguridad del tráfico aéreo en Baleares” y, por otra parte, “el absentismo laboral de los controladores de Alicante se dispara hasta una tasa del 33%”.
Según Aena, en los últimos días han aparecido en distintos medios de comunicación de Baleares declaraciones realizadas por la Unión Sindical de Controladores (USCA) en las que se pone en duda la seguridad del tráfico aéreo en las islas. Aena lamenta esta grave irresponsabilidad por parte del sindicato de controladores que no duda en realizar afirmaciones falsas que siembran inquietud en los ciudadanos y perjudican gravemente la imagen de Baleares como destino turístico, con el único fin de preservar sus intereses particulares.
Por otro lado, conforme a otro comunicado de Aena, “el absentismo laboral de los controladores del aeropuerto alicantino de El Altet se ha disparado en las últimas semanas a una tasa del 33%» y ha llegado a alcanzar al 50% de la plantilla. En colaboración con los servicios de Inspección Médica de la Seguridad Social, Aena investiga esta extraña coincidencia en el tiempo de tal cantidad de bajas laborales”. La empresa anuncia que “tomará medidas ante cualquier situación no justificada, al entender que este nivel de absentismo laboral terminará repercutiendo en el servicio que reciben los pasajeros”.