Trípoli.- El avión siniestrado el pasado miércoles en Trípoli explotó antes de alcanzar la pista. Su piloto no informó de ningún problema técnico antes de que se produjera el accidente del A330-200 de la compañía Libia Afriqiyah Airways, según informó el presidente de la Comisión de Investigación, Neji Dhaou.
«El piloto no comunicó ningún problema. Hasta el último momento, las cosas se desarrollaron con completa normalidad», declaró Dhaou. «Lo que puedo confirmar por el momento, es que el avión explotó antes de alcanzar la pista», añadió, precisando que los investigadores «no descartan ninguna hipótesis por el momento».
La comisión de investigación cuenta con dos expertos franceses y cinco técnicos de Airbus, la constructora aeronáutica de la aeronave siniestrada.
Por otro lado, la aerolínea dio a conocer este viernes las nacionalidades de las 103 personas que perdieron la vida en el siniestro. Según el comunicado hecho público, de los fallecidos 77 personas eran holandesas, 13 sudafricanos, 13 libios, 4 belgas, 2 austríacos, un alemán, un británico, un francés y un ciudadano de Zimabawe. La identidad de uno de los pasajeros aún no se ha podido determinar y 11 personas eran miembros de la tripulación.
Sólo ha sibrevivido Ruben van Assouw, el niño holandés de 9 años que sigue ingresado en el hospital. Se recupera con normalidad de las heridas que padece y de la operación a la que fue sometido debido a la rotura de sus piernas. Según los médicos que le están tratando, el niño podrá regersar a Holanda el próximo domingo ya que «Su evolución es favorable».