Madrid.- La Unión Europea acordó ayer suavizar las restricciones al tráfico aéreo al respaldar una propuesta presentada por la Organización Europea para la Navegación Aérea, Eurocontrol, de reducir el espacio aéreo prohibido a los vuelos comerciales en Europa.
Los ministros de Transporte de la Unión Europea reunidos ayer mediante videoconferencia para evaluar las medidas a seguir como consecuencia de la nube volcánica que afecta a gran parte de Europa y que ha tenido como principal consecuencia el cierre de aeropuertos en 17 países, entre ellos España, establecieron tres tipos de zonas en Europa dependiendo del grado de «afectación».
La primera zona mantiene la restricción puesto que es imposible garantizar la seguridad. La segunda, en la que, aunque se aprecien restos de cenizas, pero en principio éstas no impedirían las operaciones de tráfico aéreo. Y por último, la tercera, no afectada por cenizas por lo que no hay restricciones. Estas zonas serán efectivas a partir de las 8 horas de hoy.
Los ministros apoyaron la medida sin poner en riesgo la seguridad. La decisión se ha tomado una vez que el Reino Unido, el primer gran afectado por el fenómeno desde la semana pasada, informara de que comenzará a reanudar sus vuelos a partir de las 8 de esta mañana, después de que los niveles de de ceniza volcánica comenzaran a disminuir. Los ministros estudiaron cómo flexibilizar el protocolo sin poner en riesgo la seguridad, a partir de esa propuesta de Eurocontrol, que los técnicos «han acordado unánimente», según fuentes diplomáticas.
Según Eurocontrol, se debería adoptar un nuevo «modelo híbrido» de evaluación del riesgo más flexible, similar al estadounidense, que combine responsabilidades de las autoridades nacionales y las aerolíneas. Quedaría prohibido, por tanto, volar en un área concreta más limitada hasta que la nube se disipe, una decisión que deben tomar los países europeos y que coordina Eurocontrol.
En paralelo, las compañías aéreas podrán decidir por sí mismas si vuelan en algunas zonas del espacio aéreo fuera de esta primera ‘franja roja’ en la que el tráfico aéreo permanecería cerrado. Las aerolíneas que decidan reanudar los servicios aéreos en esos espacios libres deberán reforzar los controles posteriores al vuelo para asegurarse de que se respetan los niveles de seguridad necesarios.
por la crisis en las compañía aérea ya supera al provocado por los atentados del 11-S. Antes, la Comisión ya había anunciado que ultima los retoques de un acuerdo marco que permitirá a los estados subvencionar a las aerolíneas en casos como éste, tomando como precedente precisamente la situación creada tras los atentados en EEUU en 2001. «Estamos preparados para aprobar un marco similar al del 11-S, que permitiría conceder ayudas estatales para cubrir el coste directo de las consecuencias del evento y los sobrecostes de seguros de las aerolíneas», según el comisario de Competencia, Joaquín Almunia.El comisario europeo retransportes, Siim Kallas, aseguró ayer que el imacto económico causado