Washington.– Por unos 58 millones de dólares por un billete de ida y vuelta para un viaje de 30 días y por 35.000 dólares/ noche por alojamiento, un ciudadano que disponga de ese dinero y desee disfrutar de un mes de estancia en la Estación Espacial Internacional (ISS) podrá hacerlo a partir del año próximo, según anunció Jeff Dewit, director financiero de la Nasa, en una conferencia de prensa ofrecida el pasado viernes en el Nasdaq en Nueva York.
La Nasa está dispuesta a abrir la ISS para negocios comerciales, por lo que la innovación y el ingenio de la industria estadounidense pueden acelerar una economía comercial próspera en órbita terrestre baja.
Este movimiento se produce a medida que la Nasa se orienta a toda velocidad en su objetivo de lograr que la primera mujer y el próximo hombre en la Luna lleguen a 2024, donde las compañías estadounidenses también desempeñarán un papel esencial en el establecimiento de una presencia sostenible.
La Nasa continuará investigando y probando en órbita terrestre baja para informar sus planes de exploración lunar, mientras trabaja con el sector privado para probar tecnologías, entrenar a astronautas y fortalecer la creciente economía espacial. Brindar mayores oportunidades en la ISS para fabricar, comercializar y promover productos y servicios comerciales ayudará a catalizar y expandir los mercados de exploración espacial para muchas empresas.
El objetivo final de la agencia en órbita terrestre baja es asociarse con la industria para lograr un ecosistema sólido en el que la Nasa sea uno de los muchos clientes que adquieren servicios y capacidades a un coste menor.
El plan de la Nasa aborda tanto el lado de la oferta como el de la demanda para una nueva economía, permitiendo el uso de recursos gubernamentales para actividades comerciales, creando la oportunidad para misiones privadas de astronautas a la estación espacial, permitiendo destinos comerciales en órbita terrestre baja, identificando y persiguiendo actividades que fomentan mercados nuevos y emergentes, y cuantificación de la demanda a largo plazo de la Nasa para actividades en órbita terrestre baja.
Más de 50 empresas ya están realizando investigaciones y desarrollos comerciales en la estación espacial a través del Laboratorio Nacional de la ISS y sus resultados son muy prometedores. Además, la Nasa ha trabajado con 11 compañías diferentes para instalar 14 instalaciones comerciales en la estación que apoyan los proyectos de investigación y desarrollo para la Nasa y el Laboratorio Nacional de la ISS.
Este esfuerzo tiene como objetivo ampliar el alcance de la actividad comercial en la estación espacial más allá del mandato del Laboratorio Nacional de la ISS, que se limita a la investigación y el desarrollo. Una nueva directiva de la Nasa permitirá la fabricación y producción comercial y permitirá que tanto la agencia como los astronautas privados realicen nuevas actividades comerciales a bordo del laboratorio orbital. La directiva también establece precios para el uso industrial de los recursos del gobierno de los EEUU en la estación espacial para actividades comerciales y de marketing.
Los precios publicados el viernes son específicos de las actividades comerciales y de marketing habilitadas por la nueva directiva, reflejan un coste representativo para la Nasa y están diseñados para fomentar la aparición de nuevos mercados. A medida que la agencia aprendada cómo responden estos nuevos mercados, reevaluará el precio y la cantidad de recursos disponibles aproximadamente cada seis meses y realizará los ajustes necesarios.