Washington.- El Centro Internacional para la Resolución de Disputas sobre Inversiones (CIADI), órgano de arbitraje del Banco Mundial, ha resuelto definitivamente la disputa entre el Gobierno argentino y la empresa española Marsans, hoy desaparecida, sobre la nacionalización de Aerolíneas Argentinas, que tuvo lugar en 2008 por el ejecutivo de Cristina Fernández de Kirchner.
El Estado argentino, que ya había sido condenado hace dos años a pagar 320,7 millones de dólares, ha confirmado dicha sentencia, rechazando el recurso presentado por Argentina.
Además, Argentina deberá pagar más de un millón de dólares en costas. De todas formas, el importe total de la condena es inferior a las reclamaciones iniciales del grupo recurrente español, estimado por el mismo en alrededor de 600 millones de dólares, además de 3.5 millones de costas procesales..
Aerolíneas Argentinas, fundada en 1950, se transformó en una empresa estatal en 1979, para luego privatizarse en 1990, pasando al control de la española Iberia y, finalmente, en 2001 al grupo Marsans, también español, que cesó en sus operaciones en 2010, dos años después de la nacionalización de Aerolíneas.
El Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner decidió volver a ponerla bajo control estatal en 2008 con objeto de alejarla de la grave crisis en que se encontraba y garantizar las operaciones de la compañía y la salvaguarda de unos nueve mil empleos. El ejecutivo aplicó el principio de interés público, abriendo el proceso de venta forzosa, sin un acuerdo con Marsans, que posteriormente inició una acción ante el CIADI.