Turín.- La Agencia Espacial Europea (ESA) ha inaugurado este jueves en Turín, Italia, el Centro de Control de Operaciones de Rover (ROCC) antes de que el rover marciano de la misión ExoMars inicie su aventura de exploración en Marte, prevista para 2021.
El centro de control será el centro de operaciones que orquestará el roaming del laboratorio rodante construido en Europa, que lleva el nombre de Rosalind Franklin, al llegar a la superficie marciana en la plataforma rusa, Kazachok.
"Este es el lugar crucial en la Tierra desde donde escucharemos los instrumentos del rover, veremos lo que ve y enviaremos órdenes para dirigir la búsqueda de evidencia de vida dentro y debajo de la superficie", dijo Jan Wörner, director general de la ESA.
El rover de ExoMars será el primero de su tipo tanto para moverse a través de la superficie de Marte como para estudiarlo en profundidad con un taladro capaz de recolectar muestras desde abajo hasta dos metros hacia la superficie.
El epicentro de la acción para dirigir las operaciones de superficie de Marte en la Tierra se encuentra en las instalaciones de ALTEC en Turín, Italia. Desde aquí, los ingenieros y los científicos trabajarán hombro con hombro en el control de la misión, justo al lado de un patio muy especial de Marte.
En caso de que Rosalind Franklin aterrice en una pequeña colina o necesite superar una duna, la zona de Marte tiene una plataforma basculante de 64 metros cuadrados capaz de simular hasta 30 grados de inclinación y ayudar a decidir la mejor manera de seguir adelante.
"Gracias a ROCC, Europa tendrá la gran oportunidad de gestionar las actividades del rover en Marte y de planificar y probar sus movimientos", dijo Giorgio Saccoccia, presidente de la Agencia Espacial Italiana (ASI) durante la ceremonia de apertura. "Este será el primer paso hacia nuevas misiones robóticas para el estudio de Marte y otros cuerpos celestes".
"Además del entrenamiento y las operaciones, este centro es ideal para solucionar problemas", señala Luc Joudrier, gerente de operaciones del explorador de ExoMars que ha estado estudiando cómo se mueve un vehículo en Marte durante 15 años.
La enorme distancia de la Tierra a Marte significa que una señal puede tardar entre 4 y 24 minutos en llegar al centro de control, lo que hace que el control directo de ExoMars no sea práctico. Rosalind Franklin podrá tomar algunas de sus propias decisiones.