Bruselas.- Eurocontrol, la organización europea para la seguridad de la navegación aérea, ha asegurado que el verano de 2019 “podría ser igual de malo que el de 2018”, donde se registró un retraso de 25,6 millones de minutos en la gestión del flujo de tráfico aéreo (ATFM).
De acuerdo a los datos de Eurocontrol, en marzo de 2019, el retraso de ATFM registrado ha sido de 600.000 minutos más que el conseguido en el mismo periodo del año anterior debido a que “la capacidad de la red es menor”.
El administrador de Eurocontrol ha implementado un plan para mitigar las demoras de largo alcance, denominado -NM / ANSP, desarrollado y acordado con los proveedores de servicios de navegación aérea (ANSP) y los usuarios del espacio aéreo.
Este proyecto tiene como objetivo eliminar más de 1.000 vuelos al día de las áreas congestionadas, ya sea redirigiéndolos u alcanzando la capacidad máxima. Esto supondrá “un coste adicional para los usuarios del espacio aéreo ya que no podrán volar sus rutas preferidas, pero será un sacrificio por una buena causa: ayudar a controlar el retraso ATFM en toda la red”, aseguran desde Eurocontrol.
Sin este plan, en 2019 se podría producir hasta 35 millones de minutos de retrasos ya que la brecha entre la capacidad de espacio aéreo y la demanda de tráfico es tan grande que no se puede superar. Los únicos otros remedios posibles serían la reorganización total del espacio aéreo y el reclutamiento de controladores aéreos a gran escala, ninguno de los cuales es factible en el futuro inmediato.
Por lo tanto, desde Eurocontrol se ha enviado “a nuestros socios una lista de las mejores prácticas que, de ser seguidas, conducirán a una mejor previsibilidad y nos permitirán administrar la red correctamente y reducir la demora en la medida de lo posible”.