Arkalik.- El módulo de reentrada de la nave Soyuz TMA-15 aterrizó ayer en las llanuras de Kazajstán, trayendo de vuelta a la Tierra al astronauta de la ESA Frank De Winne, al cosmonauta ruso Roman Romanenko y al canadiense Robert Thirsk.
Los tres tripulantes se encuentran bien de salud. Debido a las condiciones de hielo en el lugar del aterrizaje, el equipo de apoyo hizo volver a sus helicópteros a sus bases en Kustanai y Arkalyk, Kazajstán.
Romanenko, De Winne y Thirsk pasaron 188 días en el espacio, 186 de ellos a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS). Los tres llegaron a la estación en mayo como parte de la Expedición 20, que marcó el inicio de una tripulación residente de seis personas a bordo de la estación. Con su llegada, las cinco agencias internacionales asociadas – la Nasa, Roscosmos, JAXA, la ESA y la canadiense CSA- han estado representadas de manera conjunta en órbita por primera vez.
Mientras tanto, a bordo de la ISS y solo durante tres semanas, la tripulación residente pasó a estar formada solamente por dos astronautas, el comandante de la Expedición 22 Jeff Williams y el ingeniero de vuelo Maxim Suraev. Esta situación se mantendrá hasta el 23 de Diciembre, fecha en la cual llegará a la ISS una nueva nave Soyuz con el astronauta T.J. Creamer, el cosmonauta Oleg Kotov y el representante de la JAXA Soichi Noguchi.