Dublín.- Por primera vez desde hace cinco años, la compañía aérea irlandesa de bajo coste Ryanair entró en pérdidas. Los malos resultados han provocado una reestructuración de la aerolínea que lleva a su CEO, Michael O'Leary, a coordinar sus filiales.
Ryanair atribuye sus pérdidas a la caída de los precios del combustible lo que ha permitido a sus competidores con pérdidas sobrevivir por más tiempo, manteniendo el exceso de capacidad en Europa.
La nueva estructura del grupo de Ryanair será similar a la de IAG, con cuatro filiales de líneas aéreas: la principal aerolínea de Ryanair liderada desde Dublín, Laudamotion y Ryanair Sun de las aerolíneas polacas y austriacas, y Ryanair Reino Unido, dirigidas por sus respectivos consejeros delegados y coordinadas por O’Leary.
O’Leary supervisará la eficiencia de los costes, el capital y la asignación de aeronaves entre las aerolíneas en su nuevo cargo, así como las posibles adquisiciones a pequeña escala, todo con un salario básico reducido y un bonus menor.
“Este año se nombrará un nuevo consejero delegado que sustituirá a O’Leary al frente de Ryanair. A medida que ampliamos la flota de Airbus de Lauda y recibimos más de 200 aeronaves B737 MAX, creemos que esta estructura de grupo ofrecerá eficacia de costes y operación, al tiempo que permitirá al grupo ver otras oportunidades de fusiones y adquisiciones a pequeña escala como el desarrollo exitoso de Lauda”, indicó la compañía.