Madrid.- El impacto de los servicios de navegación por satélite en la economía ha crecido hasta el 6 ó 7% del PIB de toda la Unión Europea, unos 800.000 millones de euros. Además, diferentes redes de servicios dependen cada vez más de estos satélites, según informa GMV.
La navegación por satélite y la economía guardan una estrecha relación. Hoy en día, los vuelos, los barcos y los teléfonos móviles necesitan de estos sistemas para guiarse, por lo que las implicaciones económicas son titánicas. La UE última su propio sistema de navegación: Galileo.
Europa no contaba con su propio sistema de navegación, por lo que cualquier corte en la señal suponía un grave problema tanto para los ciudadanos como para el desarrollo de la economía. Para asegurar que no habrá fallos en la cobertura y aumentar las posibilidades de negocio nació el sistema Galileo.
Galileo llegó para conseguir la independencia europea de sistemas como el GPS americano o el GLONASS ruso. El sistema está siendo desarrollado por la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Unión Europea, se puso en funcionamiento en 2016 y está previsto que la constelación de satélites que la conforman esté completa para el 2020. En total habrá 36 de estos ingenios en órbita.
Es un sistema totalmente civil, al contrario que sus homólogos norteamericano y ruso; pero estos sistemas podrán interconectarse entre sí para ofrecer una mejor cobertura. Los servicios que ofrecerá el sistema europeo Galileo serán gratuitos o de pago y afectarán a la precisión de la que disfrutar. La versión gratuita contará con un margen de error de un metro y la de pago tan solo llega al centímetro de error. Se estima que sea 10 veces más preciso que el sistema GPS.
Diferentes empresas de los países de la Unión han participado en la creación del sistema y el montaje de los satélites. De entre ellas, una docena han sido españolas, donde destaca la empresa GMV que ha participado en diversas tareas, como el desarrollo del centro de control o en el diseño del propio sistema con el que funciona la red de satélites.
La navegación por satélite y la economía están muy interconectadas en la actualidad. Diversos servicios necesitan de estos sistemas de posicionamiento para funcionar y las cantidades de dinero en juego son, cuanto menos, astronómicas. Desde GMV ofrecen soluciones en distintos campos como la aeronáutica o el espacio.