Melbourne.- Las autoridades australianas investigan el caso del piloto de un bimotor Piper PA-31 Navajo Chieftain de la compañía aérea australiana Vortex Air, que se quedó dormido y se pasó de su destino 46 kilómetros, según informa la agencia AP.
El piloto era la única persona a bordo de la aeronave que volaba con el piloto automático desde Devonport, en el estado de Tasmania, a la isla King en el estrecho de Bass, informó en un comunicado la compañía.
“El piloto se durmió involuntariamente cuando estaba al mando del avión", dijo la aerolínea con sede en Melbourne. “El problema se conoció cuando el control de tráfico aéreo no pudo comunicarse con el piloto en vuelo y el avión sobrepasó su destino operando en piloto automático", añadió el comunicado.
Las grabaciones del control de tráfico aéreo revelaron que se hicieron varias llamadas por radio al piloto que no fueron respondidas. El piloto despertó posteriormente y logró aterrizar sin problemas en la isla King, dijo la compañía.
La Oficina de Seguridad del Transporte y la Autoridad de Seguridad de la Aviación Civil investigan el caso y cómo es que la empresa maneja la fatiga de los pilotos.