Washington.- Como estaba previsto, poco antes de las nueve de la noche de este lunes, hora española, la sonda InSight de la Nasa inició el peligroso y apasionante descenso hasta posarse en Marte. Tras siete minutos de descenso atravesando la peligrosa atmósfera marciana, InSight tocó suelo marciano.
El ingeniero aeroespacial español Fernando Abilleira es el director adjunto de esta importante misión de la Nasa, la primera en estudiar el interior profundo de Marte.
InSight comenzó su fase de entrada, descenso y aterrizaje en Marte. A los siete minutos de entrar en la atmósfera, la nave desplegó su paracaídas, separado de su escudo térmico, levantó sus patas de aterrizaje, encendió su radar de aterrizaje y comenzó a disparar sus retrocohetes mientras se separaba de su carcasa trasera.
Minutos antes, los primeros CubeSats en el espacio profundo, Mars Cube One A y B, comenzaron a transmitir las comunicaciones de la nave espacial InSight a medida que aterrizaba en Marte.
Previamente, el aterrizador InSight se había separado de la etapa de crucero. Estuvo girando para orientar su escudo térmico en preparación para el proceso de entrada, descenso y aterrizaje en Marte.
Los controladores de la misión en el Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la Nasa, en Pasadena, California, habían completado los ajustes finales para el aterrizaje de la nave espacial InSight en Marte.
Pocas horas antes de que InSight tocara suelo marciano, los ingenieros del JP, que dirigen la misión, se prepararon para que la nave atravesara la atmósfera marciana, descendiera con un paracaídas y retrocohetes, y aterrizara a la hora prevista.
Pero antes de que InSight entrara en la atmósfera marciana, hubo que hacer algunos preparativos finales. La víspera, los ingenieros realizaron con éxito una última maniobra de corrección de trayectoria para dirigir la nave espacial a unos pocos kilómetros de su punto de entrada objetivo sobre Marte. Aproximadamente dos horas antes de llegar a la atmósfera, el equipo de entrada, descenso y aterrizaje (EDL) también pudo cargar algunos ajustes finales al algoritmo que guía a la nave de forma segura hacia la superficie.