Yakarta.- Los buzos de los equipos de Búsqueda y Rescate indonesios recuperaron una de las cajas negras del Boeing 737MAX 8 de la aerolínea nacional de bajo coste Lion Air que se estrelló el pasado lunes en el mar de Java con 189 ocupantes sin dejar supervivientes.
El dispositivo recuperado es el que registra los datos de vuelo (FDR) y los equipos siguen buscando el que graba las voces de los pilotos en cabina (CVR), indicó un miembro de la Comisión Nacional de Seguridad en el Transporte. "Procesaremos los datos contenidos en este FDR como parte del proceso de investigación para averiguar la causa del accidente”, agregó.
El dispositivo se encontró a unos 500 metros al noroeste de las coordinadas en las que se perdió contacto con el avión y a una profundidad de 30 metros, según la Agencia de Búsqueda y Rescate.
El avión, que apenas llevaba dos meses operativo, se estrelló a los pocos minutos de despegar. Ya había sufrido problemas el día antes del accidente, según un registro técnico del vuelo al que tuvo acceso la BBC. En ese documento, un libro de registro en el que la tripulación debe dejar anotados los datos técnicos del vuelo, se especifican detalles de un vuelo entre Bali y Yakarta, la capital del país, el domingo 28 de octubre, víspera del siniestro.
En él se cuenta que había un instrumento "no fiable" y que el piloto tuvo que ceder el puesto al primer oficial. El registro técnico obtenido por la BBC sugiere que la herramienta que le sirve al capitán para leer la velocidad aerodinámica no era fiable y que las lecturas de altitud diferían en los instrumentos del capitán y del primer oficial. "Se identificó que el instrumento CAPT [del capitán] no era fiable y se pasó al control FO [primer oficial]", dice el documento. La tripulación decidió continuar el vuelo y aterrizó de forma segura y sin problemas en Yakarta el día antes de la tragedia.
Por otra parte, el director ejecutivo de Lion Air Edward Sirait dijo que hubo un "problema técnico" en un vuelo de Denpasar, Bali, a Yakarta, pero añadió que fue "resuelto siguiendo el protocolo". No dio más información sobre el fallo técnico al que se refirió. "Si el avión hubiera estado mal, habría sido imposible haberlo hecho volar desde Denpasar", explicó Sirait. "Cuando recibimos el informe de la tripulación arreglamos el problema de inmediato", añadió.
Los pilotos del B737MAX 8 de Lion Air habían alertado a sus superiores que el aparato había registrado problemas con los sensores que miden la altitud y la velocidad en el vuelo del día anterior a la catástrofe entre Denpasar y Yakarta, lo cual no impidió que tras una revisión la compañía indonesia diera el visto bueno para que continuara en servicio.