Toulouse.- Un satélite ruso intentó el año pasado espiar un satélite franco-italiano que proporciona comunicaciones seguras para los Ejércitos de ambos países, denunció este viernes la ministra de Defensa, Florence Parly.
El satélite Athena-Fidus, operado conjuntamente con Italia, fue abordado "demasiado cerca" por el satélite ruso Luch-Olymp, conocido por su avanzada capacidad de escucha en el Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES) en Toulouse.
“La nave rusa trató de interceptar nuestras comunicaciones”, aseguró la ministra francesa. "Intentar escuchar a tus vecinos no solo es antipático, es un acto de espionaje", añadió. "Estamos en riesgo. Nuestras maniobras militares y nuestras operaciones están en riesgo, si no reaccionamos ", dijo la ministra Parly.
El mes pasado, Washington acusó a Moscú de desarrollar armas antisatélite y citó el "comportamiento muy anormal" de un "objeto espacial" desplegado por Rusia en octubre pasado. "Somos muy conscientes de eso”, señaló la Administración norteamericana.
Construido por Thales Alenia Space, el satélite franco-italiano proporciona comunicaciones seguras a las fuerzas armadas francesas e italianas y servicios de emergencia. La ministra Parly describió los intentos de Rusia como una “pequeña guerra de las galaxias” y anunció medidas inmediatas para evitar que las comunicaciones confidenciales se vean comprometidas. “Desde entonces, el satélite ruso Louch-Olymp apunta a otros satélites” indicó la ministra.
Las acusaciones de la ministra de Defensa se producen una semana después de que el presidente de la República, Emmanuel Macron, instara a la Unión Europea a modernizar sus relaciones con Moscú posteriores a la Guerra Fría, a pesar de las tensiones con Occidente, incluso por acusaciones de intromisión en elecciones extranjeras.
Macron pretende diseñar el próximo año planes para una “estrategia de defensa espacial" para Francia y se espera que el Comité Asesor presente sus propuestas para noviembre.