Tucson.- Después de dos años de viaje, Osiris-Rex, la sonda de muestreo de asteroides de la Nasa, ha observado por primera vez el asteroide Bennu, comenzando así su acercamiento hacia su objetivo final.
El avistamiento del asteroide tuvo lugar el pasado 17 de agosto, cuando la cámara PolyCam de la nave obtuvo la imagen desde una distancia de 2,2 millones de kilómetros.
Osiris-Rex es la primera misión de la Nasa para visitar un asteroide cercano a la Tierra, inspeccionar la superficie, recoger una muestra y devolverla de forma segura a la Tierra. La nave espacial ha viajado aproximadamente 1.800 millones de kilómetros desde su lanzamiento el 8 de septiembre de 2016 y tiene previsto llegar a Bennu el 3 de diciembre.
“Ahora que Osiris-Rex está lo suficientemente cerca para observar a Bennu, el equipo de la misión pasará los próximos meses aprendiendo todo lo posible sobre el tamaño, la forma, las características de la superficie y los alrededores de Bennu antes de que la nave llegue al asteroide”, dijo Dante Lauretta, investigador principal de millones en la Universidad de Arizona (Tucson). “Después de pasar tanto tiempo planeando este momento, no puedo esperar para ver lo que Bennu nos revela”, continúa Lauretta.
A medida que Osiris-Rex se acerca al asteroide, la nave utilizará sus instrumentos científicos para reunir información sobre Bennu y prepararse para la llegada. La carga útil científica de la nave espacial comprende el conjunto de cámaras Ocams (PolyCam, MapCam y SamCam), el espectrómetro térmico Otes, el espectrómetro Ovirs visible e infrarrojo, el altímetro láser OLA y el espectrómetro de rayos X Rexis.
“La baja gravedad de Bennu proporciona un desafío único para la misión”, dijo Rich Burns, gerente del proyecto Osiris-Rex en el Goddard Space Flight Center de la NASA en Greenbelt, Maryland. “Con aproximadamente 500 metros de diámetro, Bennu será el más pequeño objeto que cualquier nave espacial ha orbitado alguna vez”.
La nave espacial inspeccionará extensivamente el asteroide antes de que el equipo de la misión identifique dos posibles sitios de muestra. Un examen detallado de estos sitios permitirá al equipo elegir uno para la recolección de muestras, programado para principios de julio del año 2020. Después de la recolección de muestras, la nave espacial regresará a la Tierra antes de expulsar la xápsula de devolución de muestra para aterrizar en el desierto de Utah en septiembre de 2023.