París.– La candidatura para CEO de Air France-KLM de Philippe Capron, director financiero de Veolia y antes de Vivendi, ha encontrado una fuerte oposición, lo que ha forzado al accionista estatal a reunir en ámsterdam el martes y miércoles un comité estratégico y volver a seleccionar candidatos con objeto de finalizar el proceso en el próximo mes de julio.
El Ejecutivo francés ha escuchado críticas de quienes ven en la elección del actual director financiero de Veolia la repetición de los viejos esquemas al frente de Air France-KLM, mediante la elección de un inspector financiero sin experiencia en transporte aéreo.
El nuevo procedimiento debería satisfacer a quienes exigieron tanto un cambio de paradigma en la elección de los líderes de Air France-KLM como el nombramiento de un profesional reconocido en el sector de transporte aéreo.
"Al separar la gestión de Air France y la dirección del grupo, es posible ampliar los perfiles de selección, colocando a un profesional del transporte aéreo, inmediatamente operativo, a la cabeza de Air France y una personalidad internacional más general a los mandos del grupo" , explica una fuente al diario económico francés Les Echos.
Algunos candidatos, descartados por el comité de nominación durante el proceso inicial de contratación, podrían volver a plantearse para dirigir Air France, mientras que la búsqueda de un nuevo CEO para Air France-KLM podría ampliarse a candidatos extranjeros, menos conscientes de las sutilezas de la situación social francesa.
La nueva dirección también debería satisfacer a ejecutivos y empleados de KLM, que desde hace mucho tiempo han pedido la separación de las funciones de CEO de Air France-KLM y CEO de Air France para garantizar la igualdad de trato entre ambas compañías. Al renunciar a la presidencia del Consejo de Administración de Air France, el futuro presidente del holding sería menos tentado a dedicar la mayor parte de su tiempo a la empresa francesa. Al tener cada uno su propio CEO, Air France y KLM estarían en igualdad de condiciones. Lo que apacigua las relaciones entre franceses y holandeses, puestas a prueba por la crisis en Air France.
El grupo aeronáutico franco-holandés se desestabilizó a partir de la dimisión el pasado 7 de mayo de su director general, Jean-Marc Janaillac, también presidente de Air France, tras el rechazo en referéndum del acuerdo salarial que había propuesto al personal de la compañía.
El perfil de Philippe Capron corresponde al retrato robot de la presidenta no ejecutiva Anne-Marie Couderc, designada el 15 de mayo junto a un triunvirato de directivos para actuar como directora interina a la cabeza del grupo.
El Estado francés, que posee el 14.3% del capital de Air France-KLM, sigue el proceso muy de cerca. A principios de junio, la ministra de Transporte, Elisabeth Borne, indicó que el nombramiento del nuevo CEO para el comienzo del año escolar era una prioridad.