Madrid.- El Consejo de Administración de Aena, en su reunión de este martes, ha acordado tomar razón de la dimisión presentada por José Manuel Vargas Gómez de su cargo como miembro del Consejo de Administración, así como de su cargo de presidente y consejero delegado y como presidente de la Comisión Ejecutiva con efectos del próximo día 15.
Asimismo, presentó su dimisión como consejero el pasado día 18 Simón Pedro Barceló Vadell y consecuentemente como miembro de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones y de la Comisión Ejecutiva de la Sociedad, según ha comunicado Aena a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En consecuencia, tras las dimisiones presentadas, y con efectos a partir de las fechas indicadas, la composición del Consejo de Administración queda compuesta por trece miembros.
Vargas, de 47 años, licenciado en Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense de Madrid, y en Derecho por la UNED, fue designado presidente de Aena en enero de 2012 por la entonces ministra de Fomento, Ana Pastor.
Hasta julio de 2011 había sido consejero delegado de Vocento, sociedad a la que estuvo vinculado durante una década. Entre 2000 y 2002 fue director de servicios jurídicos de la entonces Prensa Española y secretario del Consejo de "Abc" entre 2000 y 2005. Pasó después a ser director general financiero durante seis años y director general de mercados nacionales de ese grupo de comunicación.
Ya como presidente de Aena, el 11 de febrero de 2015 protagonizó la espectacular salida de ésta a Bolsa, la mayor producida en toda Europa desde 2011 y en España desde la venta en Endesa en 1998. El Estado privatizó así el 49% de la gestora aeroportuaria española.
En los últimos meses, Vargas ha tenido varios desencuentros con el Gobierno, como ocurrió con su reiterado empeño en ampliar la privatización de Aena, el mantenimiento de las tarifas aeroportuarias en contra del criterio establecido en el DORA o su intención de lanzar una OPA sobre la empresa Abertis.
Pero el desencadenante de esta situación se fraguó el pasado mes de agosto, con ocasión del caos registrado en el aeropuerto barcelonés de El Prat, con la huelga del personal de la empresa Eulen responsable de la seguridad en los accesos a la zona de control de pasaportes y embarque.
La oposición pidió en el Congreso al ministro de Fomento, íñigo de la Serna, la dimisión de Vargas, que había sido reiteradamente solicitada desde los sindicatos y desde algunos medios de comunicación.