Bruselas.- Los pasajeros de un avión de la compañía aérea irlandesa de bajo coste Ryanair con origen en Bruselas y destino Madrid fueron evacuados antes de despegar al oir que uno de los viajeros gritó “Alá es grande”.
Los miembros de la tripulación avisaron a la policía y procedieron a desalojar al pasaje. la investigación del avión no encontró nada sospechoso, por lo que transcurrida más de una hora de registro, se permitió que los pasajeros accedieron de nuevo a embarcar. Finalmente, el avión pudo despegar.
Desde Ryanair informaron a este diario que “la tripulación del vuelo del 2 de septiembre de Bruselas a Madrid solicitó asistencia policial después de que varios pasajeros perturbaran el vuelo antes del despegue. La policía desalojó y detuvo a estos individuos antes de que el vuelo despegara hacia Madrid. No vamos a tolerar comportamientos de este tipo y la seguridad y el confort de nuestros clientes, tripulación y aviones es nuestra primera prioridad. El asunto está ahora en manos de la policía local”.
La policía belga ha abierto una investigación judicial sobre los hechos protagonizados, al parecer, por una persona residente en Bélgica, aunque de origen italiano, posiblemente en estado de embriaguez.