Londres.- Michael O’Leary, consejero delegado de la compañía aérea irlandesa de bajo coste Ryanair, ha amenazado con suspender los vuelos entre Gran Bretaña y Europa si no se llega a un acuerdo satisfactorio en las negociaciones sobre el Brexit a finales de 2018, según informa Yahoo.
A medida que avanzan estas negociaciones, es muy probable que se produzca la interrupción de los vuelos entre el Reino Unido y Europa, ha advertido en una reunión informativa celebrada en Londres, O’Leary expresó su frustración con el gobierno por no haber tenido en cuenta la posibilidad de que no se llegue a un acuerdo en materia de aviación con la Unión Europea.
“No hay vuelta atrás. El gobierno del Reino Unido no tiene un plan B”, afirmó O’Leary después de una conversación con el secretario de Transporte, Chris Grayling, aunque añadió que éste era cada vez más consciente de la necesidad de llegar a un acuerdo de aviación antes de que termine el próximo año.
“Necesitamos un acuerdo antes de septiembre u octubre de 2018 o de lo contrario tendremos que empezar a cancelar los vuelos o directamente anular la venta de billetes”, advirtió.
“Las aerolíneas necesitan que ambas partes lleguen a un acuerdo a finales de 2018 para poder ofrecer vuelos regulares en marzo de 2019”, explicó.
La advertencia de O’Leary se produce en medio de las presiones del gobierno sobre los miembros de la Unión Europea para que incrementen el personal de sus aeropuertos ya que las nuevas medidas de seguridad han hecho que los viajeros británicos tengan que soportar grandes retrasos.
Dado que los negociadores británicos y de la Unión Europea trabajan por llegar a acuerdos sobre temas de mayor relevancia, como la cuota de liquidación de la participación de Gran Bretaña en la Unión Europea y el destino de los ciudadanos europeos en el Reino Unido, la aviación ocupa un lugar menos relevante.
“Es poco probable que se llegue a un acuerdo anticipado antes de la Navidad de 2018, porque a los europeos no les interesa”, afirmó O’Leary. El gobierno británico insiste en que están “trabajando para conseguir el mejor trato posible” para la aviación británica tras el Brexit, pero lo cierto es que se ha avanzado muy poco en este asunto.