Roma.- La autoridad italiana de la competencia ha impuesto a la compañía española Vueling una multa de un millón de euros por prácticas comerciales indebidas. Según dicho organismo, Vueling engañó a sus clientes sobre la gratuidad de sus reservas por internet.
Conforme a una de las prácticas denunciadas, Vueling ha promovido el check-in en línea como un servicio gratuito, tanto en Internet como en los correos electrónicos enviados después de reservar el vuelo. Sin embargo, según ciertas condiciones, como el agotamiento de los asientos disponibles, se exigió posteriormente a los consumidores que pagaran unos 15 euros para completar su procedimiento de facturación en línea. Además, la compañía aérea ni siquiera informaba a los pasajeros que, como alternativa, el check-in en el aeropuerto estaba disponible sin coste alguno.
El organismo italiano también sanciona a Vueling por falta de claridad respecto a un bono de reducción equivalente al 25% del precio del billete. El descuento del que los consumidores podían beneficiarse era solamente sobre una parte del billete, es decir la tarifa básica sin impuestos, costes administrativos y otros cargos. De esta forma, Vueling no hizo comprender al consumidor la verdadera conveniencia de la compra.
Por último, según la autoridad italiana, los clientes de la compañía española debían superar distintos obstáculos para que se respetaran sus derechos sobre asistencia y reclamaciones, como, por ejemplo, un número de teléfono de pago que podía generar un coste de hasta 15 euros por llamada.