Wenchang.- China ha lanzado este sábado su cohete Gran Marcha-7 estrenando así su nuevo Centro de Lanzamiento de Satélites de Wenchang, en la provincia de Hainan, al sur del país.
El subcomandante en jefe de la misión, Wang Hongyao, anunció el exitoso lanzamiento pocos minutos después. Dijo que la carga del cohete se separó del mismo 603 segundos después del despegue, y que entró en una órbita oval con un punto más próximo, o perigeo, de 200 kilómetros, y un punto más alejado, o apogeo, de 394 kilómetros.
Está previsto que el módulo de reentrada regrese a la Tierra en la tarde de este domingo.
El Gran Marcha-7 tiene una altura de 53 metros y pesa 597 toneladas, incluyendo el combustible, compuesto por una mezcla de oxígeno líquido y queroseno, menos contaminante que los empleados anteriormente. Los científicos chinos han tardado ocho años en desarrollar este cohete, para cuyo diseño y manufactura se han utilizado tecnologías 3D.
Es un cohete mediano de dos etapas que puede transportar hasta 13,5 toneladas a una órbita terrestre baja. Los expertos dicen que se convertirá en el cohete portador principal para las misiones espaciales futuras de China.
Los primeros informes indicaron que el cohete usa ahora queroseno y oxígeno líquido como combustible en lugar de combustible altamente tóxico, lo que lo hace más amigable con el ambiente y menos costoso.
El lanzamiento de hoy es el primero desde el sitio de Wenchang y el 230 de la familia de los cohetes portadores Gran Marcha de China.
Su misión es verificar el diseño y funcionamiento del nuevo cohete portador, evaluar la capacidad de ejecución de misión del centro de lanzamiento de Wenchang, y revisar la coordinación y compatibilidad de los sistemas relacionados con el proyecto.