Everett.- El constructor aeronáutico norteamericano Boeing inauguró en Everett, al noroeste de EE UU, próxima a la línea de montaje del futuro B777X, la nueva planta dedicada a la construcción de las alas de este modelo que son de materiales compuestos y serán las mayores del mundo.
Se trata de una imponente factoría con una superficie de 110.000 metros cuadrados, equivalente a 24 campos de fútbol y en la que se han invertido 1.000 millones de dólares. Su construcción se inició en octubre de 2014 y dará trabajo a miles de personas de la zona.
El B777X entrará en servicio a principios de 2020. La producción del primer avión comenzará el año que viene. Disponible en dos versiones, el B777-8X será capaz de llevar a 350 pasajeros y a una distancia de hasta 14.000 kilómetros, mientras que el B777-9X tendrá capacidad para 425 pasajeros y una autonomía de 16.000 kilómetros.
Una característica del B777X estriba en la posibilidad de plegar los extremos de sus alas para reducir su tamaño en el suelo de 72 a 65 metros. Su precio varía de 371 a 400 millones de dólares, según la versión de que se trate.
El B777-8X competirá directamente con el Airbus A350-1000. Hasta ahora, Boeing ha acumulado 320 pedidos y compromisos del B777X de seis clientes en todo el mundo.