Lyon.- Científicos y expertos en el planeta Marte de toda Europa y de Rusia siguen de cerca la misión ExoMars 2016 lanzada el pasado día 14 desde Baikonur, en Kazajstán, como en la Universidad francesa de Lyon, donde esperan con impaciencia los primeros resultados. Uno de los grandes misterios que esperan resolver es la presencia de metano.
Para Patrick Thollet, profesor asociado en la Escuela Normal Superior (ENS) de Lyon, “el gas que más nos interesa es el metano, porque no es estable en la atmósfera de Marte. Lo que sí es estable en la atmósfera de Marte es el dióxido de carbono. Sabemos que si hay metano dentro de cientos de años se transformará en dióxido de carbono. Entonces, si hay metano, esto quiere decir que en este momento es el planeta mismo quien lo emite".
Los científicos tratarán de averiguar de dónde emerge el metano en Marte y compararán esos datos con las nuevas imágenes que genere la misión ExoMars, como señala Cathy Quantin-Nataf, profesora de la Universidad de Lyon: "Para mí, que estudio la superficie de Marte, el principal instrumento que me va a interesar es la cámara CaSSIS, diseñada en Berna, Suiza, que nos permitirá tener imágenes en color y con una resolución que hoy no tenemos. Además, tendremos la topografía y el relieve de forma sistemática y en alta resolución".
Esas imágenes alimentarán también el actual debate sobre la presencia de agua salada en algún momento y en determinados lugares de Marte. "Realmente no se ha descubierto agua líquida en Marte; lo que se ha descubierto son restos de sal, que pudieron ser depositados por el agua líquida. Pero, atención, no estamos hablando de sal de cocina, se trata más bien de unas sales que se ponen en el agua para hacer lejía, explica Patrick Thollet de la ENS de Lyon. Así que no es algo que favorezca realmente la vida”.
Cuando en octubre el cohete ruso Protón llegue al planeta rojo lanzará y pondrá en órbita la sonda TGO (Trace Gas Orbiter) y el aterrizador, llamado módulo Schiaparelli, en dirección a la superficie de Marte.
Allí irá a posarse en una superficie que puede parecerse a la estepa kazaja, pero que en realidad es muy diferente, mucho más fría y seca. Características que explorará el módulo Schiaparelli, señala Francesca Ferri, investigadora de la Universidad de Padua: "Gracias a la cápsula que atravesará la atmósfera de Marte, haremos mediciones localizadas en función de las condiciones atmosféricas, que podremos integrar a nuestros modelos para comprender cómo funciona el clima de Marte".
Mientras, los espectrómetros situados en órbita, realizarán también mediciones de la atmósfera del planeta Rojo. Uno de estos espectrómetros ha sido desarrollado por Oleg Korablev, del Instituto de Investigación espacial de Moscú: "Nuestro instrumento sirve para medir la presencia de gases mediante la medición de la radiación solar que pasa a través de la atmósfera del planeta rojo".
Al final, el análisis de todos esos datos nos ayudará a responder cuestiones científicas fundamentales:"¿Existe vida en Marte?", ¿Alguna vez hubo vida allí en el pasado?
"Podemos pensar que es un planeta muerto, pero en realidad allí ocurren cosas, dice Patrick Thollet. Y el cambio pone en juego la presencia de agua, que es el primer ingrediente de la vida".