ámsterdam.- Con objeto de neutralizar aviones no tripulados dirigidos a distancia que puedan ser utilizados con fines terroristas o delictivos, en general, la Policía holandesa ha puesto en marcha una iniciativa consistente en usar águilas para interceptar estas aeronaves.
La iniciativa consiste en una “solución de baja tecnología para un problema de alta tecnología”, como la ha definido la compañía holandesa Guard from Above. Según un comunicado de la Policía, se trata de buscar remedio a la proliferación de drones que, en un futuro, serán utilizados cada vez más, aumentando el riesgo terrorista y, en general, la seguridad para la sociedad civil.
La idea, calificada como “pionera en el mundo” por la Policía holandesa, ya ha sido considerada por otros países, entre ellos España, que estudia la posibilidad de entrenar estas aves rapaces ante un hipotético ataque de drones o, simplemente, la eventual intromisión de los mismos en las proximidades de edificios e instituciones oficiales.
Pero, por si acaso, la iniciativa no fuera del todo eficaz, la Policía holandesa trabaja ensayando sistemas electrónicos avanzados que puedan hacerse con el control remoto de un avión no tripulado y en la programación de drones capaces de neutralizar aparatos no identificados, según confirma el comunicado. Esta tecnología detecta las señales de radio de los dispositivos aéreos y utilizan mecanismos de rastreo para forzar al avión no tripulado a aterrizar.