Bruselas.- Los ministros de Interior de la Unión Europea acordarán este viernes intensificar los controles en aeropuertos y en fronteras exteriores, en general, de la zona Schengen para reforzar la seguridad tras los atentados yihadistas en París, según un borrador de documento al que tuvo acceso la agencia Reuters.
Los ministros llegarán a un acuerdo para "poner en práctica inmediatamente las comprobaciones sistemáticas y coordinadas necesarias en las fronteras exteriores, incluyendo a individuos que se benefician del derecho de libre circulación", dice el proyecto de conclusiones de la reunión del viernes.
El documento refleja las peticiones de Francia para reforzar los controles en las fronteras exteriores del espacio Schengen de 26 países, de los que son miembros la mayoría de los países de la UE, excepto Reino Unido, Irlanda, Chipre, Croacia, Rumanía y Bulgaria.
Desde el pasado 21 de septiembre y sin esperar a que se establezca una directiva europea para identificar la llegada al territorio de posibles sospechosos, el estado francés reclamó a las compañías aéreas que le transmitiera los datos de los pasajeros recogidos en el momento de la reserva y el embarque. En fase de inicio de desarrollo y limitado a vuelos extra-comunitarios, el plan se ampliará en 2017 a todos los vuelos que despegan o aterrizan en Francia, con una capacidad de seguimiento den 200 millones de pasajeros.
En su discurso ante el Congreso reunido en Versalles el pasado lunes, el presidente francés, FranÇois Hollande, estableció como una de sus prioridades para incrementar la seguridad del país la adopción de la directiva europea denominada API/PNR (Advanced Passenger Information-Passenger Name Record) de aquí a fin de año o comienzos del próximo.
El Ministerio del Interior español pretende también hacerse con el Registro de Nombres de Pasajeros, que gestionan las compañías aéreas, con fines de prevención y represión de actos terroristas, que fue ideado por Bruselas, pero que cuenta con la oposición del Parlamento Europeo.
De hecho, desde el 11-S, la Comisión Europea intenta suscribir acuerdos para transferir a terceros países, y en concreto, a EE UU, datos de carácter personal contenidos en el PNR. Según el ministro español Jorge Fernández Díaz, España trata de que Bruselas active esta iniciativa. "Estamos instando a que el Parlamento Europeo dé luz verde a la normativa PNR. Será un registro del nombre de pasajeros que da una trazabilidad de personas y permitirá saber de dónde vienen y garantizar mejor la seguridad de los que entran en territorio europeo procedentes de otras zonas", indicó.
El PNR contiene toda la información necesaria de cada viajero para su tramitación, reserva y control por parte de las compañías aéreas. Con ella se elabora una base de datos con información personal, tales como el nombre, apellido, número de pasaporte o documento nacional de identidad, número de teléfono, dirección; información de carácter financiero, como la forma de pago y el número de tarjeta con la que se realizó la reserva; los datos propios del viaje: fechas, itinerario, datos del billete, número de asiento, equipaje.
Adicionalmente, puede contener información calificada como “suplementaria”, que incluye datos sobre billetes sólo de ida, situación de stand by y situación de “no presentados”; y otras informaciones sobre servicios especiales solicitados. La información recogida debe contener todo el historial de cambios de los datos de PNR y los datos recogidos en el sistema de información anticipada sobre los pasajeros (sistema API).
Ya hay nueve países que recopilan datos PNR y treinta planean hacerlo. Para implementar este sistema, Francia ha recibido una ayuda de 17 millones de euros de la Unión Europea. Otros 13 países europeos también se han beneficiado de la financiación comunitaria.