Sevilla.- La magistrada del Juzgado de Instrucción número 13 de Sevilla, Ana Rosa Curra, ha levantado el secreto del sumario que instruye sobre el accidente del A400M, que costó la vida de cuatro técnicos de Airbus y pone en conocimiento de la Fiscalía las filtraciones de la investigación por si pudieran constituir delito de desobediencia, infidelidad en la custodia de documentos o violación de secretos.
En el auto hecho público ayer la juez pide que se pongan en conocimiento de la Fiscalía “las filtraciones llevadas a cabo en los últimos días, durante la vigencia del secreto de las actuaciones, a raíz del examen de los datos extraídos” de las cajas negras del A400M siniestrado “en un área supuestamente segura de las instalaciones de Airbus”, por si pudiera ser constitutivo de un “delito de desobediencia a la autoridad, infidelidad en la custodia de documentos y/ o violación de secretos”.
Según el auto, se ordena el levantamiento del secreto de las actuaciones, cuyo mantenimiento la jueza considera ya “innecesario” dada las filtraciones de datos relevantes para la investigación. En él, además, recuerda que se adoptó esa decisión para llevar a cabo las diligencias de investigación oportunas.
El secreto del sumario no ha impedido que en la semana pasada se produjeran diversas filtraciones de declaraciones contradictorias de destacados directivos de Airbus, atribuyendo la causa del accidente a distintos factores, mientras el presidente ejecutivo del Grupo aeroespacial europeo, Tom Enders, se quejaba en ämsterdam, con ocasión de la Junta Anual de Accionistas, que el juez español no hubiera levantado el secreto del sumario.
Un día más tarde, el diario económico alemán Handelsblatt recogía unas manifestaciones de Marwan Lahoud, director de Estrategia de Airbus, que basándose en “los datos de las cajas negras” del avión siniestrado, aseguraba que “hubo un problema de calidad en el montaje final” del A400M. “Tenemos un problema serio de calidad en el montaje final”, añadió Lahoud al periódico germano.
Inmediatamente salió al paso Fabrice Brégier, director ejecutivo de la División de aviones comerciales, para quien el accidente del A400M en Sevilla no se debió a un fallo de ensamblaje en la planta sevillana, como apuntó el director de Estrategia del Grupo, ni a un error de diseño; sino que las causas habría que buscarlas en los procedimientos de los vuelos de prueba, o en la aplicación de esos procedimientos, según declaró a una emisora de televisión.
Por otra parte, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) señala que “hasta este momento, se ha procedido a extraer los datos de las dos cajas negras, FDR (Fly Data Record) y CVR (Cokpit Voice Record). La primera en los laboratorios de L-3 COM, Aviation Recorders 100, en Estados Unidos, y la segunda en la BEAD Air, Francia. Dichos datos se están analizando, sin que, hasta el momento, se haya emitido informe acerca de las causas exactas que motivaron el accidente”.
“El equipo de investigación de la Comisión para la Investigación Técnica de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM), encargado de elaborar el correspondiente informe técnico, se encuentra realizando dicha investigación con apoyo de un grupo reducido de técnicos especializados de Airbus en los diferentes sistemas de la aeronave, cuyo apoyo fue considerado necesario por los miembros del equipo de investigación de la CITAAM. Continúa la investigación para el análisis de la totalidad de los datos extraídos de los distintos equipos de la aeronave”, concluye el TSJA.