Lisboa.- Al cumplirse el pasado viernes el plazo de presentación de ofertas por el 61% de la compañía aérea portuguesa TAP, el secretario de Estado de Transportes luso, Sergio Silva Monteiro, anunció que se habían recibido tres propuestas.
Tras el fracaso de un primer intento de privatización a finales de 2012, la venta parcial de la compañía fue relanzada a mediados de noviembre pasado. En febrero el gobierno portugués anunció la venta de un 66% de la compañía aérea, reservando un 5% para los trabajadores y convocó el concurso de ofertas cerrado ahora. Se trataba de salvar “el futuro de la compañía y de sus empleados”, dijo entonces Silva Monteiro, para quien “estarían en peligro si no llega un nuevo accionista con liquidez dispuesto a invertir”.
Ya entonces se declararon interesados la española Air Europa (a través de su matriz Globalia), el empresario portugués Miguel Pais do Amaral, el brasileño David Neeleman (a través de la compañía Azul) y el magnate colombiano-brasileño Germán Efromovich. La aerolínea española decidió posteriormente no concurrir y, al final, según la prensa portuguesa, las ofertas recibidas al término del plazo han sido las de los tres restantes.
A pesar de la reciente huelga de diez días de los pilotos de TAP y la contestación de la privatización por parte de la oposición, el gobierno recibió "tres ofertas que abren una ventana de esperanza para la aerolínea nacional”, aseguró Silva Monteiro sin identificar a los tres ofertantes.