Taipei.- Los dos motores del ATR72-600 de TransAsia, que cayó a un río en Taipei el pasado miércoles, fallaron consecutivamente poco después de despegar, concluyen las autoridades de Taiwán, tras los primeros análisis de las cajas negras del avión.
El vuelo GE235 de TransAsia, con 53 pasajeros y cinco tripulantes a bordo, cayó al río Jilong a los 3 minutos y 23 segundos de despegar del aeropuerto Songshan de Taipei con destino Kinmen, una pequeña isla costera situada cerca del continente chino, pero controlada por Taiwán. Solo 15 personas sobrevivieron al accidente. Las autoridades taiwanesas dan por muertas a las personas desaparecidas y cuyos cuerpos se buscan en el río.
El Consejo de Aviación Civil (CAC) de Taiwan señaló que el avión presentó problemas a los 37 segundos de despegar del aeropuerto. El motor derecho, envió una señal de alerta a los pilotos, de acuerdo con el análisis inicial de las cajas negras del avión. Los datos sugieren que la tripulación trató de cortar el suministro de combustible al motor averiado. El motor izquierdo se apagó automáticamente por razones desconocidas y el piloto intentó volverlo a poner en marcha, pero no lo consiguió.
"El avión tuvo una señal de detención del motor derecho cuando la altitud era de 1.200 pies", indicó el director ejecutivo del Consejo de Seguridad de Vuelo, Wang Xingzhong, al ofrecer los resultados preliminares del examen de las cajas. El motor izquierdo seguía funcionando normalmente en ese momento, pero se detuvo poco después por razones desconocidas. "Durante los momentos finales del vuelo, ningún motor tenía potencia. Al poco, se escucha la señal de socorro 'Mayday', un ruido externo y se interrumpe la comunicación", añadió.
Un minuto antes de estrellarse el avión se registraron cinco alertas automáticas de que el avión estaba perdiendo potencia suficiente para mantenerse en vuelo. Expertos taiwaneses apuntaron que, en una situación de fallo mecánico como la que ocurrió, el piloto no podía hacer mucho, por lo que pidieron un mayor control de las revisiones y más medidas de seguridad.
La Administración de Aviación Civil de Taiwán ha ordenado que todos los pilotos del modelo ATR72 de TransAsia sean sometidos a pruebas sobre la operación del avión.