Washington.- La Nasa asegura que no hubo fuga de amoníaco en la Estación Espacial Internacional (ISS) y que la alarma pudo deberse a un fallo informático o a un sensor defectuoso. Se está investigando la alerta producida y que hizo sospechar de una filtración de amoníaco, material tóxico utilizado por el sistema de refrigeración.
Desmiente así la agencia espacial norteamericana la información de sus colegas de la agencia rusa Roscosmos, recogida ayer por este diario y, según la cual, “una fuga en el sistema de refrigeración de un segmento estadounidense de la ISS había desprendido sustancias nocivas a la atmósfera”
El astronauta español Pedro Duque, que en 2003 permaneció durante ocho días en la ISS, corrigió vía twitter la información anterior de este diario asegurando que “no ha habido ninguna fuga. Lo que podría haberse fugado es amoníaco puro. Tampoco es para tanta alarma”.
Mike Suffredini, uno de los responsables de la misión de la ISS en la Nasa, explicó que se está investigando la alerta que se produjo después de que el centro de control de Houston (Texas) detectara una alerta de fallo en el sistema de refrigeración y un incremento de la presión en la zona habitable de la ISS, consistente con una filtración de amoniaco.
No obstante, los datos de telemetría y la tripulación han confirmado que no se ha producido la temida filtración, aunque por precaución la tripulación de la ISS seguía recluido en el módulo ruso, con las esclusas cerradas, mientras se verifican las mediciones.