Londres.- Airbus y Boeing suman ya en los tres primeros días del Salón Aeronáutico Internacional, que se celebra durante esta semana en Farnborough los 100.000 millones de dólares en pedidos de aviones, lo que demuestra el saludable estado de la demanda de nuevos aviones comerciales.
Tras la desesperación mostrada el martes por el director general de Qatar Airways, Akbar al Baker, por el retraso en la entrega de sus A380 por parte de Airbus, este miércoles la aerolínea catarí ha formalizado un pedido a Boeing de 50 aviones 777-9 X por un importe de 19.000 millones de dólares, a lo que habría que sumar una opción por otros 50 aviones más, lo que duplicaría esa cantidad citada.
Airbus, por su parte, llevaba acumulados 60.000 millones de dólares entre pedidos y compromisos en la feria, según evaluaba la agencia Reuters. Destacaba el lanzamiento de su A330neo, versión remotorizada de su avión de doble pasillo que supondrá un importante ahorro de combustible respecto a su popular serie A330.
Pero no han sido sólo los grandes constructores aeronáuticos los que han hecho su agosto este mes de julio en Farnborough, también otros, como el canadiense Bombardier , que ayer recibía tres pedidos por 20 aviones de su modelo CSeries y también superaba la marca de 500 aviones de su Q400. Otro tanto puede decirse del brasileño Embraer y del europeo ATR.
Especial significado tiene la intensa demanda por parte de las empresas de leasing aeronáutico, como se ha puesto de relieve en los primeros días del Salón, y que indican claramente su apuesta por el futuro crecimiento en los mercados emergentes de Oriente Medio y Asia.
Como reflejo de la intensa actividad en los tres primeros días de la feria alrededor de los chalets de las firmas expositoras, se han sobrepasado las ventas de la edición anterior que registraron 72.000 millones de dólares y presumiblemente se superen las cifras del Salón parisino de Le Bourget el pasado año que llegaron a los 135.000 millones de dólares.