Kuala Lumpur.- El Gobierno de Malasia y la empresa británica de satélites Inmarsat difundieron el martes datos utilizados para determinar el trayecto del vuelo MH370 de la compañía aérea Malaysia Airlines, reclamados por los familiares de los pasajeros.
Los datos de las comunicaciones vía satélite con el avión, que ocupan 47 páginas en un informe preparado por Inmarsat, incluyen señales detectadas cada hora -o confirmaciones de entrada al sistema- después de que el avión desapareciera de los radares civiles el 8 de marzo, según recoge la agencia Reuters.
Los familiares de los pasajeros esperan que abrir los datos para que sean analizados por un amplio rango de expertos puede ayudar a verificar la última ubicación del avión, casi tres meses después de la desaparición del Boeing 777 con 239 pasajeros y tripulación. La divulgación de los datos se convirtió en una petición de muchos de los familiares, que acusaron al gobierno malasio de retener información.
Basados en el análisis de Inmarsat y de otros investigadores, la aeronave se habría estrellado en el sur del océano Indico, en una zona paralela con el extremo occidental de Australia.
Investigadores malasios sospechan que alguien apagó las conexiones de datos del vuelo para que no se pudiera rastrear al avión, pero hasta el momento no ha surgido nada sospechoso sobre la tripulación o los pasajeros.
En las horas siguientes a la desaparición, un satélite de Inmarsat recogió varios "pings", señales que indican que el avión continuó volando tras desaparecer de los radares y lo que ayudó a limitar la búsqueda a una zona del océano Indico.
La densa información técnica divulgada el martes detalla comunicaciones vía satélite desde antes de que el vuelo despegara el sábado hasta una señal final transmitida por el avión. Los datos incluyen una transmisión final desde la aeronave ocho segundos después, tras la cual no hubo más respuestas.
En la información también se incluyen dos "llamadas telefónicas" que un portavoz de Inmarsat dijo fueron hechas por Malaysia Airlines desde tierra y que no fueron contestadas desde el avión.
El portavoz dijo que la existencia de esos dos intentos de comunicación era de conocimiento público.
Un representante de Inmarsat dijo que la compañía había divulgado toda la información relacionada con el vuelo.
Los cálculos basados en las señales y la velocidad del avión mostraron que el aparato posiblemente se estrelló en un área remota del océano siete u ocho horas después de que sus comunicaciones normales fueran aparentemente desconectadas cuando se dirigía a Pekín en su trayecto rutinario.
El momento del último contacto por satélite es consistente con la capacidad de combustible del avión. Sin embargo, después de que fracasara la búsqueda más extensa en la historia de la aviación para hallar restos del avión, responsables dijeron que podría llevar un año recorrer el área de 60.000 kilómetros cuadrados donde podría haber caído la aeronave.